Él no te da la felicidad pero bien rápido la quita, Él no te da la felicidad pero si está te alegra el dĂa. Me tienes frito y no te quiero ni ver, metienes frito, te necesito.
Los lagartos cambian de piel cuando les pega el lorenzo, notan la tierra que empieza a arder y sĂłlo tienen desierto. Cierto...
Y no hay más cera que la que arde cuando la vida se acelera, aún vas deprisa pero vas tarde y la suerte no te espera...
Me tienes frito esperando el autobus, Me tienes frito por las aceras, Me tienes frito ver cĂłmo vienes y vas, Me tienes frito que nunca vuelvas.
Los lagartos...
Los marcianos no van a venir porque saben que es esto, y si estuvieran estarĂan aquĂ quedándose boquiabiertos...